¿Cuál es la diferencia entre altavoces activos y pasivos?

Un altavoz pasivo es el que requiere elementos electrónicos externos como amplificadores y etapas de potencia. Para poder reproducir un sonido este recibe una señal sonora que procede de una fuente de audio que puede ser un teléfono móvil, un ordenador, un blu-ray, dvd o una mesa de mezclas.

Un altavoz activo es aquel que se caracteriza por tener filtros activos que pueden ser digitales o analógicos en lugar de filtros pasivos. Estos logran dividir el espectro de la audiofrecuencia en varios intervalos compatibles con unos transductores que se emplean en el funcionamiento del mismo.

Diferencias entre altavoces activos y altavoces pasivos

La diferencia más notoria que existe entre estos dos tipos de altavoces, leemos aquí, es que los altavoces activos tienen un amplificador que está incorporado en sus cornetas y los altavoces pasivos necesitan un amplificador externo. Los altavoces activos también se llaman autoamplificados ya que están constituidos con una caja que incorpora un conjunto de elementos para que se pueda aplicar el sonido por sí solo que son un amplificador y un altavoz.

Entonces quiere decir que el altavoz pasivo reproduce el sonido sin tener que amplificarlo ni hacerle ningún ajuste adicional, solo necesitará recibir la señal y este compuesto que es un amplificador independiente para que el sonido se emita de forma independiente.

Algunas ventajas y desventajas de utilizar altavoces activos son las siguientes:

Una de las desventajas más marcadas de este tipo de altavoces que son mucho más costosos que los altavoces pasivos pero estos son a la vez una opción más económica porque no necesitarás comprar ningún tipo de amplificador dependiendo de la marca y la gama de los altavoces que estés comprando.

La calidad es muy importante en este punto a la hora de escoger este tipo de altavoces.

No vas a necesitar usar un amplificador externo. Su uso es muy fácil solo necesitas conectarlo a la fuente de sonido y controlar la señal que se emite desde este.

Necesitas mucho menos espacio para ubicarlos ya que estos son altavoces que no requieren un espacio adicional y también tienen menos cables. Estos necesitan una conexión a la corriente a diferencia de los altavoces pasivos.

Cuando utilizas altavoces pasivos podrás aplicarlos a muchos ámbitos de la música porque podrás conectarte a Hi Fi de alta fidelidad y podrás colocarlo con pantallas que tengan un cabezal de guitarra eléctrica o bajo eléctrico, pero también este tiene sus pros y sus contras:

Al utilizar un altavoz pasivo podrás modificar y mejorar la calidad del sonido sin tener que cambiar los altavoces solamente tendrás que cambiar un amplificador.

Estos altavoces son más livianos y menos pesados, esto se debe a que no tienen incorporado un amplificador dentro de su caja y ocupará mucho menos espacio.

Estos altavoces son bastante más económicos que los altavoces activos, pero si vas añadirles un amplificador el precio será mucho más costoso.

Entonces antes de decidirte por cuál de estos dos altavoces puedes comprar debes analizar el uso que le vas a dar, por ejemplo, si son para escuchar música en tu casa y ya tienes un amplificador o una mesa de mezclas o tarjeta de sonido sería ideal que utilices altavoces pasivos.

Está será una de las mejores opciones para ti porque ya tienes la mitad del equipo que necesitas, para utilizarlos de no tenerlos esto te saldría un poco más caro porque tendrías que comprar un equipo adicional.

Ahora bien si no cuentas con ningún tipo de amplificador es mejor que vayas directamente a comprar altavoces activos. Estos son altavoces que tienen todo en uno y te sirven para reproducir música en tu casa, en un estudio o para llevarlos a una fiesta. Puedes buscar opciones bastante económicas y acudir a un mercado de segunda mano para conseguir cualquiera de los dos.